LUIS. DIRECTOR-PRESIDENTE PROYECTO HOMBRE C�DIZ

LAS PERSONAS QUE ME RODEAN, SOBRE TODO LAS QUE EST�N EN TRATAMIENTO Y SUS FAMILIAS, ME ENSEÑAN Y ME DAN FUERZAS Y MOTIVACIÓN PARA CONTINUAR

Proyecto Hombre supone tener la oportunidad, junto a otras personas, de poner en práctica una serie de valores y conocimientos, para conseguir que otras personas tengan la posibilidad, si así lo deciden, de iniciar un cambio en sus vidas.

Disfrutar del encuentro profundo con los que forman parte de Proyecto Hombre: usuarios, familiares, personal contratado, voluntariado, colaboradores…

Vivir los conflictos, dificultades, retos con serenidad, humildad, confianza, contando con mis colaboradores, con los compañeros de otros centros de Proyecto Hombre y de otras entidades, con mi familia, siendo consciente que sólo soy una pieza más de un gran engranaje, donde siempre el verdadero protagonista es la persona que nos pide ayuda.

Proyecto Hombre es una continua superación en el día a día, ya que surgen multitud de situaciones, y a lo largo del tiempo al adaptarnos a los continuos cambios que se producen.
Hay una pregunta que me hacen en muchas ocasiones: ¿Cómo aguantas? ¿Cómo lo haces para continuar? La respuesta es clara: por las fuerzas que me transmiten todas las personas que me rodean, pero sobre todo las que están en tratamiento y sus familias: son un referente en mi vida: superación, cambio, esperanza, ilusión… Ellos me enseñan (aunque piensen que es al revés) y me dan las fuerzas y la motivación para continuar.

Pero sobre todo Proyecto Hombre, para mí, es darle sentido a mi vida, al ver a Dios en el rostro, en la mirada de cada persona que viene hundida, vacía, el primer día que llega a nosotros. Y en la sonrisa y plenitud que encuentro en ellos cuando consiguen su alta terapéutica. Cuando ellos consiguen darle un sentido a sus vidas.