Editorial Revista Proyecto 97

Tener claro el camino en la vida no es fácil o, más bien, tener claro hacia dónde caminar es lo difícil. Cuando uno tiene claro a dónde quiere llegar, sin duda buscará la manera más adecuada, aunque le cueste. Muchas veces hemos escuchado que “todos los caminos conducen a Roma�; sin duda alguna todos los caminos conducen a Roma o a donde queramos llegar. A juzgar por la realidad de esta sociedad de hoy, y leyendo este número de PROYECTO, la confusión es amplia en muchos ambientes, pero de un modo especial a la hora del consumo de alcohol.

Está claro, como trata de hacerlo la Asociación Proyecto Hombre, que es tiempo de pensar y buscar, proponer y responder ante el vacío existencial y asistencial que genera la complicada realidad del consumo de alcohol. No es tarea fácil, pero esto no justifica que miremos hacia otro lado, ni que convirtamos en habitual algo que no es normal: aquellos padres que callan y otorgan, el consumo de alcohol por parte de sus hijos e hijas; leyes y normas, cuando las hay, que se ignoran o incumplen; botellones encubiertos a modo de fiestas de verano o despedidas universitarias; macrobotellones, teóricamente “controladosâ€� por los ayuntamientos; venta de alcohol a menores, sin ningún tipo de control en distintos establecimientos… En definitiva, nos quejamos de lo que en ocasiones permitimos o incluso fomentamos. Son tantos los intereses que, en muchos, llevan a una actitud hipócrita ante tan grave problema.

El conocido proverbio latino “in vino veritas�, en el vino está la verdad, es de todos conocido y muy repetido. Sin embargo la segunda parte del proverbio pocos la conocen y casi nadie la recita: “in aqua sanitas�, en el agua la salud. Es necesario, como en el proverbio, saber buscar y ver las segundas partes o hacer un análisis completo, o lo más completo posible y no parcial, de la realidad.

Tenemos una juventud mayoritariamente sana, formada y que sabe responder adecuadamente ante la vida. Tenemos una minoría que va a más, que no lo tiene tan claro,
ni tiene las mismas posibilidades, capacidades, habilidades… Es ahí, a ellos, adonde hemos de llegar, y no solo desde la ley, sino con algo más. Con todas las herramientas que estén a nuestro alcance, tratando de acompañar y educar. Desde la familia en primer lugar, junto con todas las personas que somos parte implicada, generando espacios de encuentro, momentos para compartir, para sentir juntos, para hacer equipo, no solo en calidad y calidez, sino también en cantidad…

El problema del alcohol va más allá de la botella. No podemos conformarnos con el control y la represión, no podemos permitir el embotellamiento del ser humano desde su infancia o juventud. Tenemos la responsabilidad de formar personas con capacidad de pensar, con espíritu crítico, que sepan caminar en libertad y con dignidad. Personas que tengan claro hacia dónde caminan, para qué y para quién. Tenemos una ardua tarea que es de todos/as, pero de un modo especial de quienes, como Proyecto Hombre, estamos día a día encontrándonos con la realidad de las personas, más allá de datos y estadísticas.

Manuel Muiños
Presidente Revista PROYECTO
Director-presidente Proyecto Hombre Salamanca